domingo, 21 de junio de 2009

¡hola, infancia!

Paseando por internet, conocí el blog de Marisa. Es una chica de mi generación, quien colecciona juguetes y objetos relacionados con su infancia ( y la de muchas de nosotras). Su muñeco favorito es el topo gigio, y pasé mis buenas horas en la compu revisando las entradas de su blog, para encontrara a MI topo gigio, porque yo también tengo uno, el juguete más querido de mi infancia
Se trata de un topito que en sus buenas épocas cantaba canciones. ¡Sí, las cantaba! Porque en la espalda tenía un dispositivo similar a un tocadiscos, y venía con distintos disquitos. Recuerdo una canción particularmente:

Se va, se va la barca
se va, se va el vapor,
y el lunes por la mañana
también se va mi amor.

Me levanto tempranito,
me voy derecho a la mar
a preguntarle a las olas
si es que lo han visto pasar...

(y ahí se escuchaba el llanto del topo)

Yo, contentísima, me dispuse a rescatar al topo del baúl en que sabía que lo tenía guardado. Pensaba que estaba impecable, porque realmente así lo recordaba, ya que en mi infancia mi mamá no me dejaba que les hiciera nada a los muñecos, sólo jugaba un rato y ella los guardaba. Así llegaron casi sin uso a mi vida adulta, en perfectas condiciones.



Pero había olvidado algo...

¡¡La llegada de mis hijos, ja ja ja!!

Totalmente opuesta a la forma de actuar de mi mamá, yo me propuse que mis hijos debían jugar con los juguetes, que para eso eran... Y bueno, llegaron los mellizos, que eran dos demonios de Tazmania, ¡¡y arrasaron con todo!!

¡¡Cuando lo vi!! Claro, entonces recordé que lo había guardado para preservar de las garras infantiles a ese muñeco que yo había amado tanto... Totalmente desnudo, le falta el ombligo (con el que se reiniciaba o paraba la canción) y parte del tocadiscos, además de los bigotes. Por suerte, en lo demás está muy bien.



Así que lo limpié y le hice como pude una remera y un pantalón (¡qué mala costurera soy, dios mío), y las imperfecciones de la costura fueron suplidas por mi cariño... Y así quedó mi muñeco querido; ahora que no hay niños en casa lo dejaré a la vista, ya no lo esconderé... (¡hasta que crezca mi nieto, porque si sale al padre o al tío, mamita queridaaa! )

Al que no le gustó ni medio fue a Manucho Mujica. El topo quiso jugar un rato con él, pero Manu... ¡¡no quiso saber nada de compartir la pelota!!

8 comentarios:

Leti dijo...

Que simpatico lo que escribiste. Yo tambien me acuerdo de Topo Gigio .Fue muy popular en su tiempo. El traje te quedo muy bonito.
Un abrazo

Luciana dijo...

jajajaja ¿un mini tocadisco incorporado! fuaaaaaa!!!! me encantó. Cuando yo era muy pequeñita mi abuela me regaló un jueguito de te de porcelana. Como aun estaba en jardin de infantes se me rompio. Mi papá pegó las partes y mi mamá lo guardó en lo alto de su ropero. Yo lo veia y queria jugar con él. MI abuela le decia que me lo diera, que para jugar hasta la destruccion total me lo habia regalado. Mamá no me lo devolvió hasta que fui bastante (bastante) más grande. Pero hoy yo puedo jugar cuando quiero con mi jueguito de te, y aunque lloriquee bastante de chica hoy se lo agradezco a mi vieja. Igual me quedan muchos de mis juguetes, lo especial de este es que esta en su caja de carton original que tiene forma de alacena. LO podes ver al jueguito en accion en las manos de kuma san, en la entreda "a tomar el te" http://queestastramando.blogspot.com/2009_04_01_archive.html Y si, uno vuelve a la infancia a traves de estos recuerdos. besos!y seguro el topo gigio (yo tambien lo veia en la TV) se amiga pronto con manucho.

El rincòn de mi niñez dijo...

jajjaj Ay Marisa,cuanta ternura detrás de este post.
El topo es bien feliz y que lindo que aún después de tanto tiempo lo conserves.Estoy llegando al número 100 en mis topos.Y lamentablemente no tengo al que era de mi niñez..El que llevaba al arrastre de sus orejotas y le había perdido un zapatito.No sabés cuanto lo echo de menos.
La foto con el perro salchicha me mató es hermosa.
El topo parlanchín así como bauticé al mío lo compré el año pasado muy descuidado sin su maquinita con el disco.Tanta pena me dio el pobre.No pude evitar comprarlo y rescatarlo de ese mundo cruel.
Solo un topo gigio me decía día a dia.Y ahora ellos invadieron mi casa.
HERMOSO POST.
Me llevo tu foto para mi blog.
Besos y gracias

Gabriela dijo...

Me recuerda que mi abuela y mi mamá hacían lo mismo con mi hermana: guardaban todas las muñecas y demás cosas que le compraban para que no las rompa. (me lo cuenta siempre mi hermana)
Ella tambien tenía un topo gigio, de eso me acuerdo!

Esther dijo...

Que bonito... mi madre tambien tiene guardadas las muñecas que me quedaron decentes, jeje! Para las nietas, dice...
Manucho tiene celos... jijiji
Besotes!

Jorgelina dijo...

Hola!!!
LLego a tu blog a traves del Marisa que es mi amiga.
Yo adoro tambien al Topo Gigio,su ternura e inocencia me pueden!!!

Ahora esta por salir la coleccion de dvd de Topin,a los chicos le van a encantar,mi hija esta ansiosa por tenerla.

Tu perrito es hermoso,yo tuve dos salchichas en mi vida,Donna en mi infancia y Loli que fallecio hace 2 años.

Un beso enorme,fue un gusto conocerte.
Sigo pasando.

Sergio dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sergio dijo...

Hola!! Acabo de comprarme uno igualito hace día atrás.
Te hago dos preguntas.
¿Te acordás cuál era la ropita original?
Me falta un disquito para que tenga sonido, ¿no tendrás uno que te pueda comprar?
Me encantó el cariño que le tenés al Topo Gigio!!!
Saludos!! (sergiod16@yahoo.com.ar)