últimos plegados

Giroscopio, con su caja, obsequio para Pilar (la dueña de la perrita Florencia)

Otro giroscopio, esta vez sin caja. Es para Luci, y tiene además dos rosas en papel batic violeta:

Dos sonobes cuyos nombres no recuerdo, en un solo móvil colorido (aún sin caja)

Y aún solo, suelto, el bonito electra plegado anoche:

¡¡llegó el amor!! ¿LLegó?

Ella, una diosa...

Él... ¡escondido, muerto de miedo! ¡Hombre, tenía que ser!

Florencia, con todas las pilas y la buena onda... "¡Vení, papito!"

¡Manucho Mujica, no seas antipático!

Si ella marcha para un lado...

...él sale corriendo para el otro...

"¡Y bueno, dale, te presto a mi papá, si ya te lo apropiaste sin permiso!"

"Pero Javier es mío, mío, míííoooo!"

chambrita diana

Ya terminé mi tejido de la "chambrita Diana" que había empezado. Fue lindo tejerla porque, como ya mencioné anteriormente, se teje de costado y en una sola pieza (idel para las que sufren cuando hay que coser, como yo).Sólo hay que hacer la costura de las mangas, y el proceso de tejido no es nada tedioso, sino que hay que prestar atención. De todas maneras, es muy sencilla de hacer, sobre todo gracias a las explicaciones clarísimas que Diana escribió generosamente en su blog.

¡Gracias, Diana!

¡Buscate una novia, Manucho!

Manucho Mujica, te quiero mucho pero... ¡Ya bastaaaaa!

¿Es posible plegar un mísero papel de esta manera?

papiroflexia y tejidos

Ya pasado el importante evento del cumple número tres de Manucho, muestro la cajita terminada del kusudama "otoñal". Pronto esta grulla volará, porque este trabajito ya tiene dueño...

Así lo recibirá:

Abrirá la caja...

...¡sorpresa!

Estuve investigando un poco, porque en muchos sitios aparecía la palabra "sonobe" designando a lo que yo llamaba "kusudama". Llegué a la conclusión (no sé si es exactamente correcta) de que un sonobe es un cuerpo geométrico formado por módulos de papel que se encastran. Un kusudama, en cambio, es la bola de papel que se cuelga con finalidad ornamental, y puede estar formado por módulos encastrados (sonobe) o papeles pegados. No sé si fui clara , y tal vez a ninguno de los virtuales lectores de este blog le interese, pero me pareció adecuado llamar correctamente a cada cosa. Por lo tanto, todos estos kusudamas que hice con sus cajitas, son también sonobes.

En cambio, el siguiente no lo es; es un kusudama con papeles pegados entre sí:

Me encanta, porque juega con las marcas de los dobleces hechos en el papel. Como fue el primero, el que hice para aprender, usé papeles de diferentes colores. Igualmente, me parece que quedó alegre y vistoso, y seguramente también le haré su caja, cuando le llegue el turno (con las cajitas estoy atrasadísima, aunque... ¿quién me corre? ja ja ja...).

Visto desde otro ángulo:

Con los mismos dobleces, pero pegando los papeles de manera diferente:

Aprendí cómo hacerlo en este blog ; aunque no está el diagrama pude reproducir los dobleces correspondientes.

Ya hice el kusudama: arriba de la bola hay un pájaro, y abajo una flor, los dos en papel plateado. De cuando en cuando, alguna perlita cristalina. El hilo es de seda, plateado, y no pude fotografiar muy bien por la hora y porque el conjunto es un poco largo. Espero que les guste, aún así.

Releo todo y me parece que están retornando a mí el lenguaje y el afán docente de que todo el mundo me entienda... ¡vade retro, todavía noooo!

Pero no todo es papel, también sigo tejiendo para el/la bebé. Estoy con un saquito cuyas instrucciones saqué del blog de Diana , y por ahora estoy por acá:

Se teje en una sola pieza, de costado, y realmente es rápido. Lo que me sucede es que tardo porque hago varias cosas al mismo tiempo, pero creo que en la próxima entrada, ya estará terminado (o casi), y daré más detalles sobre él.

¡Hasta entonces!

¡¡FELIZ CUMPLE!!

¡Que los cumplas feliz, que los cumplas feliz!

¡Que los cumplas, Manucho Mujica!

¡Que los cumplas feliiiiiiiz!

terminados... ¡por fin!

Ahora sí, la mañanita negra está lista, bloqueada, pegado el botonazo de nacar... ¡me gusta!

Además, hoy trabajé en una caja de origami para uno de los kusudamas. Hela aquí, ¿qué les parece? (entre paréntesis, ¡qué difícil es escribir con Manucho Mujica durmiendo a upa!)

Así recibimos el obsequio:

Abrimos la caja...

¡y aquí está!

Ahora deberé hacer las cajas de los otros: el otoñal de la grulla y este verde y dorado, con un lirio , otra figura tradicional del origami:

¡Qué mala foto! Bueno, trataré de mejorar para cuando tenga su caja,,,

¡Hasta pronto!

kusudamas

Con 12 módulos: una esfera otoñal y la pequeña grulla iniciando su viaje...

Con 24 módulos: alegre y femenino, ¡chicle con lunares, entre las estrellas!

Las ideas y diagramas, en este blog.

lecturas

Ya que estoy con tiempo, les comento que terminé de leer el libro de Saramago que me regaló Javier ("La balsa de piedra"). Me gustó, aunque no tanto como otros del mismo autor que me fascinaron: Memorial del convento, Ensayo sobre la ceguera, El Evangelio según Jesucristo o Todos los nombres (estoy citando los títulos como los recuerdo, y no soy nada buena memorizando títulos, así que pido perdón si nombré mal a alguna novela)


Ahora bien... Para Navidad, pensé en regalar un libro a mi hermano y pedí alguna recomendación a mi profe del curso de poesía. Ella me aconsejó una novela de Celine: "Viaje al fondo de la noche", pero no la encontré en ninguna librería de Lanús, y no pensaba ir hasta Capital sólo para seguir buscándola, así que desistí y mi hermano recibió lo clásico: una remera.


Pero ayer, cuando salí del Banco, pasé por una de las librerías que había consultado... ¡¡Y ahí estaba, llamándome desde la vidriera!!




Ya estoy enganchadísima, y es de las novelas que prefiero: buena y con muuuuchas páginas, para mantener el placer de la lectura por bastante tiempo.

Y claro que eso me resta tiempo para las artesanías, pero ¿cómo podía negarme a su llamado?

actualizando...

Atenta a los reclamos (justificados) de Marta, aquí estoy de nuevo (¡perdón, Martita!).

Lo que sucede es que no tengo mucho para mostrar, porque terminé un pantaloncito para mi niet@, pero no le saqué fotos antes de regalarlo... Es chiquito, pero me llevó tiempo por lo tedioso, imagínense, ¡todo con punto jersey!. Lo tejí blanco con rayitas finitas verdes, más para distraerme un poco que por otra razón.

Además, cansada un poco de la ropa de bebé, me dediqué a la mañanita cuyo patrón publicó Delfina aquí. Ella la tejió como un bolero y le quedó súper canchero, pero yo no podría usar algo así por mis quilitos de más, y eso me preocupaba. No obstante, seguí el patrón al pie de la letra... ¡y quedó apto para mí! Claro que, como es grande, se me terminó el hilo y tendré que comprar más. La idea era utilizar los restos de hilo que había en casa, sin volver a comprar, pero bueno, llegué hasta aquí:

Lo abroché con un prendedor provisoriamente,y para la foto calculo hacer unas diez vueltas más, aunque según el patrón sólo me falten dos (si lo hago corto voy a parecer Coquito, el amigo del capitán Piluso).

El fin de semana pasado, Mariano estuvo en Plaza Francia vendiendo sus obras de cerámica y de sumi-e, y por ser la primera vez, le fue bastante bien. Las piezas de papel no pudieron venderse, porque los fiscales no consideran al origami una artesanía sino una manualidad (sin embargo, es una artesanía japonesa, pero bueno, donde manda capitán no manda marinero). Mi hijo se dio cuenta de que la pintura es más "vendible" que la cerámica, así que ahora está preparando más material para llevar. El que sigue es uno de los sobres que hizo: la primera foto lo muestra cerrado; la segunda, abierto. Adentro lleva papel para carta con una pintura chiquitita, que no fotografié:

Las siguientes son algunas de las pinturas chicas, sólo falta enmarcarlas:




El próximo sábado piensa ir a la feria de San Isidro... ¡Ojalá que tengas suerte, hijito!

regalitos

Había dicho que mostraría los regalos que mis hijos me hicieron para Navidad, y hoy lo cumplo.

Me encantaron, porque los tres pensaron sólo en lo que me gusta, y dieron en el blanco. Apostaron a tres de las actividades que más me fascinan: la lectura, el tejido y el origami.

Javier: una novela que no había leído de Saramago. Aclaro "que no había leído" porque muchos libros los leí y releí varias veces... ¡y volvería a hacerlo! Es La balsa de piedra, y gracias a ella estoy descansando un poco la espalda, porque la lectura es una de las pocas cosas que me pueden hacer suspender cualquier actividad artesanal:

Lucía: una hermosa pintura. Me pintó... ¡con mis lanas! Me encantan los colores, la expresión (siempre mirando hacia abajo, tejiendo), ese ovillo enooorme a mis pies, el hilo que se derrama del sol... En cuanto pueda y no me olvide, lo enmarco y lo cuelgo en casa:

Mariano: cha chan cha chan... ¡papeles para origami! Siempre quise tenerlos, pero como no los venden cerca de casa, tengo que conformarme con papeles para la compu, papel afiche, papel cualquiera, ja ja ja... Pero ahora sí, son míos... y me da lástima usarlos:

¡Qué hermosos colores! Hoy los estrené. Aprendí el magic rose cube , primero por supuesto en papel de taco común, y luego con los papeles nuevos:

De verdad es mágico, ¿no les parece? Para quien le interese, en la lista de blogs que leo están los dos de origami que más visito: la trenza y kaminomichi . En este último pueden encontrar, entre otros, los diagramas de esta hermoso plegado. Si les gusta, ¡sólo hay que animarse!