¡Jugando con la pelotita!
Para que tarde un poquito más, desde el interior de la cocina, se la arrojo por la ventanita del amor... ¡y allá va, la agarra y vuelve corriendo!
y ¡otra vez a jugar!
"¡Dale, dale, sigamos jugando!"
Hasta que le digo que no juego más, cuando ya lo veo con la lengua afuera:
Entonces pasa a sus otras activadades:
Indispensable: dormir...
¡Y mimos, muuuchos mimos!
1 comentario:
Jajajaja!!es tan lindo!!!!
Oli tambien juega pero con un muñequito que adora y se lo lleva oara todos lados.
Besos
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